Viaja a Buenos Aires? Lo Trasladamos Desde El Aeropuerto
RESERVE AQUÍ
(+54911) 5333-9942...Local 15-5333-9942
Por más que autoridades municipales y taxistas juren y perjuren que no faltan autos de alquiler en la ciudad, por las noches, en horas pico y sobre todo en los días previos a las fiestas cuesta mucho, lo que se dice mucho, conseguir un taxi o un remís. El radiollamado da siempre ocupado y la desesperación cunde cuando hay real necesidad de llegar a horario. Ante esa situación, ¿qué hacen cada vez más pasajeros, además de insultar? Le proponen al que le sigue o antecede en la fila compartir el viaje. Las más dispuestas son las mujeres, seguidas de los jóvenes. Los caballeros de edad mediana, en cambio, se muestran más reacios. Es una tendencia que crece, afirman abrepuertas y pasajeros, con más frecuencia en las paradas céntricas. Sin embargo, en los barrios también se da.
"Acá lo veo mucho, más entre mujeres grandes y chicos jóvenes, e incluso entre personas de distinto sexo", dice Abel (25), mientras abre la puerta de los taxis para quienes esperan en rigurosa fila ante la tienda Falabella.
Es mediodía y el clima navideño abarrota el centro de gente empaquetada y con necesidad de llegar cuanto antes a su casa. A esa hora todavía hay taxis libres, pero a partir de las 17.30 y hasta la noche la cosa se complica por la salida de los empleos, el regreso de las compras y las salidas y despedidas de año.
Por eso, ya no sorprende a nadie que quien espera un taxi en el segundo lugar de la fila pregunte a quien lo antecede "¿Y usted hacia adónde va?". Si el recorrido básico es el mismo, se puede aprovechar el viaje o simplemente aproximarse a destino, la respuesta es "vamos".
"Y... cuando llevás media hora en la esquina y no aparece ni una banderita, ¿por qué decir que no?", admite Lucrecia (22) en Mitre y Santa Fe.
Filántropos.También puede aparecer un filántropo que, al conseguir un taxi, sea quien ofrece compartirlo. Difícil que en ese caso le digan que no. Pero casos hay.
En la esquina de Sarmiento y Córdoba, Fernanda Elizabeth (30) abre puertas y confirma que la práctica "se ve mucho", pero cada tanto "alguno no quiere y hasta se enoja si se lo proponen".
De hecho, una mujer ubicada en la parada responde lacónicamente "no" a la pregunta de LaCapital sobre si compartiría un taxi. No sólo eso: tras contestar se aleja.
No es rara la reacción, ya que la mayoría de quienes aún no se animan son víctimas de la desconfianza: temen que su acompañante les robe.
"Yo quedé presa entre las ganas de hacerme la progre y mi propio prejuicio: hace unos días un tipo me sugirió compartir y a mí no me gustó la pinta, pero tampoco me animé a decirle que no porque usualmente acepto. Cuando ya estábamos en camino se me ocurrió pensar si no podía estar en complot con el taxista para robarme: porque imposible no era", se sincera María Eugenia (33), que sin embargo subió. Y no le pasó nada.
Virginia (40) hace años abre puertas por Sarmiento. Y también cree que cada vez más gente comparte taxis para paliar los déficits del servicio y, de paso, que el viaje cueste algo menos. Nuevamente, "siempre mujeres".
"Y, sí... yo compartiría, con la condición de que me inspire confianza y solamente si es otra señora", confirma Cintia (76), en la misma esquina.
Los jóvenes parecen no ser tan temerosos. Salen más de noche (cuando los taxis no dan abasto) y, en general, disponen de menos plata. Por lo tanto, comparten con frecuencia, por ejemplo, al volver o al ir a bailar: les sale más barato y logran llegar.
Y las fiestas son otro de esos escenarios en que la exclusividad se resigna en favor de algo más básico: simplemente poder viajar.
Mas Inf:http://www.lacapital.com.ar/la-ciudad/Ante-la-falta-de-taxis-ahora-se-impone-compartir-viajes-20111214-0016.html
Visite nuestros Blogs: Guia de Buenos Aires Guia de Argentina Buenos Aires Guide Agenda de Buenos Aires Mi Buenos Aires Tango Mundo Gay Tus Sabores Como llegar... Como ir..
Visite nuestra Web: :Taxi Web
"Acá lo veo mucho, más entre mujeres grandes y chicos jóvenes, e incluso entre personas de distinto sexo", dice Abel (25), mientras abre la puerta de los taxis para quienes esperan en rigurosa fila ante la tienda Falabella.
Es mediodía y el clima navideño abarrota el centro de gente empaquetada y con necesidad de llegar cuanto antes a su casa. A esa hora todavía hay taxis libres, pero a partir de las 17.30 y hasta la noche la cosa se complica por la salida de los empleos, el regreso de las compras y las salidas y despedidas de año.
Por eso, ya no sorprende a nadie que quien espera un taxi en el segundo lugar de la fila pregunte a quien lo antecede "¿Y usted hacia adónde va?". Si el recorrido básico es el mismo, se puede aprovechar el viaje o simplemente aproximarse a destino, la respuesta es "vamos".
"Y... cuando llevás media hora en la esquina y no aparece ni una banderita, ¿por qué decir que no?", admite Lucrecia (22) en Mitre y Santa Fe.
Filántropos.También puede aparecer un filántropo que, al conseguir un taxi, sea quien ofrece compartirlo. Difícil que en ese caso le digan que no. Pero casos hay.
En la esquina de Sarmiento y Córdoba, Fernanda Elizabeth (30) abre puertas y confirma que la práctica "se ve mucho", pero cada tanto "alguno no quiere y hasta se enoja si se lo proponen".
De hecho, una mujer ubicada en la parada responde lacónicamente "no" a la pregunta de LaCapital sobre si compartiría un taxi. No sólo eso: tras contestar se aleja.
No es rara la reacción, ya que la mayoría de quienes aún no se animan son víctimas de la desconfianza: temen que su acompañante les robe.
"Yo quedé presa entre las ganas de hacerme la progre y mi propio prejuicio: hace unos días un tipo me sugirió compartir y a mí no me gustó la pinta, pero tampoco me animé a decirle que no porque usualmente acepto. Cuando ya estábamos en camino se me ocurrió pensar si no podía estar en complot con el taxista para robarme: porque imposible no era", se sincera María Eugenia (33), que sin embargo subió. Y no le pasó nada.
Virginia (40) hace años abre puertas por Sarmiento. Y también cree que cada vez más gente comparte taxis para paliar los déficits del servicio y, de paso, que el viaje cueste algo menos. Nuevamente, "siempre mujeres".
"Y, sí... yo compartiría, con la condición de que me inspire confianza y solamente si es otra señora", confirma Cintia (76), en la misma esquina.
Los jóvenes parecen no ser tan temerosos. Salen más de noche (cuando los taxis no dan abasto) y, en general, disponen de menos plata. Por lo tanto, comparten con frecuencia, por ejemplo, al volver o al ir a bailar: les sale más barato y logran llegar.
Y las fiestas son otro de esos escenarios en que la exclusividad se resigna en favor de algo más básico: simplemente poder viajar.
Mas Inf:http://www.lacapital.com.ar/la-ciudad/Ante-la-falta-de-taxis-ahora-se-impone-compartir-viajes-20111214-0016.html
TAXI !!!, Transfer Airport
Reservas y Consultas vía e-mail : Argentina.Taxis@gmail.com Visite nuestros Blogs: Guia de Buenos Aires Guia de Argentina Buenos Aires Guide Agenda de Buenos Aires Mi Buenos Aires Tango Mundo Gay Tus Sabores Como llegar... Como ir..
Visite nuestra Web: :Taxi Web